Protección Divina
Por: Pastor Carlos Orellana
PROTECCION DIVINA
Nuestra Seguridad en Dios
TEXTO BASE:
2 Timoteo 4:18
Yo sé que Dios siempre me protegerá de todo mal y me cuidará, hasta que me lleve a su reino celestial. ¡Él merece que lo alabemos por siempre! Amén. (BLS)
Objetivo:
Comentar la Protección que Dios da a sus hijos en particular.
INTRODUCCION
La Protección de Dios es más que solo estar viéndonos o escuchándonos para librarnos del mal. Se refiere a el cuidado integral de nuestro ser para que no se pueda atrofiar en su trayectoria hacia la morada celestial.
Con esto en mente podemos conjeturar que el Señor definitivamente está interesado en que nosotros no perdamos nuestra confianza en El sobre su cuidado hacia cada uno de sus hijos.
Tal cuidado es algo especial, El nos tiene en sus manos y nadie puede de ese lugar arrebatarnos. E incluye todo lo que tenemos y poseemos. Por eso es notorio el ejemplo de Job. El acusador dijo: “le has cercado”. No solo a Él sino también lo que era de Él.
Este es el principio de Dios para nuestra vida, su protección es total. Nada se nos quedara por fuera de su protección. Además es solo para los que están con El. Esto hace un poco de malestar para algunos que lo escuchan pero es esto es así, pues Dios no puede cuidar a alguien que no quiere ser cuidado por El.
Nuestra dicha en lo material es una prueba fehaciente de su protección hacia nosotros. Así que Dios en verdad nos protege.
PROTECCION DIVINA
Dios esta protegiéndonos de:
1.- Las plagas (sean estas identificadas en términos humanos o espirituales)
En el término humano podemos ser específicos con las cosas que vienen literalmente a nuestros bienes materiales.
Para abordar sobre este aspecto hay que ser remitido a las plagas que el Señor trajo a Egipto estando su pueblo en un lugar específico de Egipto, Gosén.
Aquí es notoria esta verdad de la protección de Dios. Mientras los juicios de Dios caían de manera directa sobre Egipto el pueblo de Israel en cambio está gozando de la protección divina.
Las Plagas:
1.- El agua del Rio Nilo se convierte en Sangre.
Éxodo 7:21
Asimismo los peces que había en el río murieron; y el río se corrompió, tanto que los egipcios no podían beber de él. Y hubo sangre por toda la tierra de Egipto.
2.- Las ranas.
Éxodo 8:5
Y Jehová dijo a Moisés: Di a Aarón: Extiende tu mano con tu vara sobre los ríos, arroyos y estanques, para que haga subir ranas sobre la tierra de Egipto.
3.- Los piojos. (de esta plaga en adelante los hechiceros no pudieron replicar las plagas)
Éxodo 8:16
Entonces Jehová dijo a Moisés: Di a Aarón: Extiende tu vara y golpea el polvo de la tierra, para que se vuelva piojos por todo el país de Egipto.
4.- Las Moscas
Éxodo 8:24
Y Jehová lo hizo así, y vino toda clase de moscas molestísimas sobre la casa de Faraón, sobre las casas de sus siervos, y sobre todo el país de Egipto; y la tierra fue corrompida a causa de ellas.
Aquí nos hace referencia a la separación que Dios hace sobre su pueblo sobre los egipcios
Éxodo 8:22
Y aquel día yo apartaré la tierra de Gosén, en la cual habita mi pueblo, para que ninguna clase de moscas haya en ella, a fin de que sepas que yo soy Jehová en medio de la tierra.
5.- Muerte del ganado y se hace de igual forma la separación.
Éxodo 9
3.- he aquí la mano de Jehová estará sobre tus ganados que están en el campo, caballos, asnos, camellos, vacas y ovejas, con plaga gravísima.
4.- Y Jehová hará separación entre los ganados de Israel y los de Egipto, de modo que nada muera de todo lo de los hijos de Israel.
6.- Ulceras
Éxodo 9:9
Y vendrá a ser polvo sobre toda la tierra de Egipto, y producirá sarpullido con úlceras en los hombres y en las bestias, por todo el país de Egipto.
7.- El granizo
Éxodo 9:25
Y aquel granizo hirió en toda la tierra de Egipto todo lo que estaba en el campo, así hombres como bestias; asimismo destrozó el granizo toda la hierba del campo, y desgajó todos los árboles del país.
Éxodo 9:26
Solamente en la tierra de Gosén, donde estaban los hijos de Israel, no hubo granizo.
8.- La Langosta
Éxodo 10
13.- Y extendió Moisés su vara sobre la tierra de Egipto, y Jehová trajo un viento oriental sobre el país todo aquel día y toda aquella noche; y al venir la mañana el viento oriental trajo la langosta.
14.- Y subió la langosta sobre toda la tierra de Egipto, y se asentó en todo el país de Egipto en tan gran cantidad como no la hubo antes ni la habrá después;
15.- y cubrió la faz de todo el país, y oscureció la tierra; y consumió toda la hierba de la tierra, y todo el fruto de los árboles que había dejado el granizo; no quedó cosa verde en árboles ni en hierba del campo, en toda la tierra de Egipto.
9.- Las plagas de las tinieblas
Éxodo 10:21
Jehová dijo a Moisés: Extiende tu mano hacia el cielo, para que haya tinieblas sobre la tierra de Egipto, tanto que cualquiera las palpe.
Éxodo 10:22
Y extendió Moisés su mano hacia el cielo, y hubo densas tinieblas sobre toda la tierra de Egipto, por tres días.
Éxodo 10:23
Ninguno vio a su prójimo, ni nadie se levantó de su lugar en tres días; mas todos los hijos de Israel tenían luz en sus habitaciones.
10.- La muerte de todo primogénito
Éxodo 11
4.- Dijo, pues, Moisés: Jehová ha dicho así: A la medianoche yo saldré por en medio de Egipto,
5.- y morirá todo primogénito en tierra de Egipto, desde el primogénito de Faraón que se sienta en su trono, hasta el primogénito de la sierva que está tras el molino, y todo primogénito de las bestias.
6.- Y habrá gran clamor por toda la tierra de Egipto, cual nunca hubo, ni jamás habrá.
7.- Pero contra todos los hijos de Israel, desde el hombre hasta la bestia, ni un perro moverá su lengua, para que sepáis que Jehová hace diferencia entre los egipcios y los israelitas.
Como se puede notar en estos pasajes bíblicos es que Dios siempre estuvo protegiendo a su pueblo de las plagas, es indudable que hoy continúa haciendo lo mismo.
2. El Ángel de la muerte (exterminador, destructor, arruinamiento).
Esta última plaga nos muestra un aspecto particular que hoy tenemos sobre nuestra vida otorgada en el calvario.
En esta plaga Dios dice sobre la muerte de un cordero y la presencia de la sangre para ser excluidos del ente de la muerte.
Ahora tenemos la sangre bendita del Cordero de Dios que está dándonos la certeza de que el Señor tiene restringida a la muerte sobre nosotros. Hemos sido llamados para vida no para muerte, y esto es lo que podemos entender cuando decimos que Dios nos protege de la muerte.
La Sangre es una protección que gozamos los hijos de Dios. Solo las entidades espirituales saben cuan gran poder tiene la sangre de Cristo en nuestras vidas. Estas se mantienen al margen de este gran poder.
Éxodo 12:23
Porque Jehová pasará hiriendo a los egipcios; y cuando vea la sangre en el dintel y en los dos postes, pasará Jehová aquella puerta, y no dejará entrar al heridor en vuestras casas para herir.
Es evidente que la Sangre nos protege de ángel de la muerte, no puede traspasar sus límites a menos que el Señor a si lo designe.
3. Del mal.
En la entrevista de Satanás con el Señor se hace alusión a esta protección divina que Dios da a sus hijos sobre toda clase de mal, haciéndolos prospero y bendecidos por su mano.
Cuando Dios nos está protegiendo, las bendiciones vienen y están con nosotros, como si fuese una especie de imán que son atraídas sin ninguna duda.
Job 1:9
Respondiendo Satanás a Jehová, dijo: ¿Acaso teme Job a Dios de balde?
Job 1:10
¿No le has cercado alrededor a él y a su casa y a todo lo que tiene? Al trabajo de sus manos has dado bendición; por tanto, sus bienes han aumentado sobre la tierra.
Job 1:11 Pero extiende ahora tu mano y toca todo lo que tiene, y verás si no blasfema contra ti en tu misma presencia.
Hay algunos que han sido engreídos creyéndose que lo que tienen en por su esfuerzo y dedicación podría ser cierto hasta cierta parte, solo que los hijos de Dios no nos vendrá la calamidad y quedaremos de forma humillada para siempre pues el Señor está con nosotros y nos ha prometido su bendición.
CONCLUSIONES
Dios nos protege. Si así no fuese, nosotros los hijos de Dios estaríamos siendo caídos a granel por el enemigo que nos encontraría tan vulnerables.
La Protección directa del Señor es para sus hijos y pues para los que no los son solo gozan de su imparcialidad en las bendiciones pues los primordiales somos nosotros.