Hombres en la cima
Por: Pastor Carlos Orellana
HOMBRES EN LA CIMA
1 Pedro 5:6
(BLS) Por eso, sean humildes y acepten la autoridad de Dios, pues él es poderoso. Cuando llegue el momento oportuno, Dios los tratará como a gente importante.
INTRODUCCION
Los procesos en la vida son muy importantes, es decir, aprender de todas las experiencias que pasamos, nos ayudan siempre y cuando tratemos de verles ese lado de enseñanza.
Pareciera que son inútiles a simple vista para muchos pero tienen un gran propósito para los que han sabido aprovecharlos.
Carácter, perspectivas, convicciones y propósitos se despiertan a través de ellos. Nos hacen llegar a óptimos niveles de superación personal.
El Dios de la Biblia utiliza muy a menudo el proceso llamado tiempo. Este es muy costoso para el ser humano pues no puede dejarlo ir debido a su misma condición de mortalidad.
Pero Dios es eterno y por lo tanto El si puede esperar para que las cosas ocurran. Ahora bien, El Señor nos moldea con este proceso de tiempo de manera maravillosa.
Dejemos por tal razón nuestra vida en sus manos.
DEFINICION DE PALABRAS
HUMILLACIÓN
G5013 - tapeinóo
Deprimir; figurativamente de humillar (en condición o corazón).
EXALTACIÓN
G5312 - jupsóo
Elevar (literalmente o figurativamente):- enaltecer, exaltar, levantar.
TIEMPO
G2540 - kairós
Tiempo fijo o apropiado:- oportunidad, sazón, tiempo.
Hablaremos de 3 personajes bíblicos que hicieron que el factor tiempo jugara un papel importante.
1.- José y su proceso (tiempo) para alcanzar la grandeza – forjamiento del carácter
José a sus cortos 17 (Gen. 37:2) años de edad comenzó a tener sueños de grandeza.
Génesis 37:5-11
Y soñó José un sueño, y lo contó a sus hermanos; y ellos llegaron a aborrecerle más todavía.
Y él les dijo: Oíd ahora este sueño que he soñado:
He aquí que atábamos manojos en medio del campo, y he aquí que mi manojo se levantaba y estaba derecho, y que vuestros manojos estaban alrededor y se inclinaban al mío.
Le respondieron sus hermanos: ¿Reinarás tú sobre nosotros, o señorearás sobre nosotros? Y le aborrecieron aun más a causa de sus sueños y sus palabras.
Soñó aun otro sueño, y lo contó a sus hermanos, diciendo: He aquí que he soñado otro sueño, y he aquí que el sol y la luna y once estrellas se inclinaban a mí.
Y lo contó a su padre y a sus hermanos; y su padre le reprendió, y le dijo: ¿Qué sueño es este que soñaste? ¿Acaso vendremos yo y tu madre y tus hermanos a postrarnos en tierra ante ti?
Y sus hermanos le tenían envidia, mas su padre meditaba en esto.
Estos sueños casi se ven imposibles por las dificultades que le acompañaron por 13 años de espera.
1.- Odiado y vendido por sus hermanos. (Gen. 37:4)
2.- Esclavo en la casa de Potifar. (Gen. 37:36)
3.- Acusado de violación siendo inocente. (Gen. 39:17-19)
4.- Encarcelado. (Gen. 39:20-23)
5.- Olvidado por quienes recibieron un beneficio por él. (Gen. 40:23)
Hasta la edad de 30 años vio completado su sueño.
Génesis 41:46
Era José de edad de treinta años cuando fue presentado delante de Faraón rey de Egipto; y salió José de delante de Faraón, y recorrió toda la tierra de Egipto.
Lo importante en este proceso de tiempo es que su carácter fue forjado, le ayudo a mantener una actitud de humildad y no corromperse por la grandeza una vez que estuvo allí.
Sus hermanos probaron de su benevolencia
Génesis 45:4
Entonces dijo José a sus hermanos: Acercaos ahora a mí. Y ellos se acercaron. Y él dijo: Yo soy José vuestro hermano, el que vendisteis para Egipto.
Ahora, pues, no os entristezcáis, ni os pese de haberme vendido acá; porque para preservación de vida me envió Dios delante de vosotros.
Pues ya ha habido dos años de hambre en medio de la tierra, y aún quedan cinco años en los cuales ni habrá arada ni siega.
Y Dios me envió delante de vosotros, para preservaros posteridad sobre la tierra, y para daros vida por medio de gran liberación.
Así, pues, no me enviasteis acá vosotros, sino Dios, que me ha puesto por padre de Faraón y por señor de toda su casa, y por gobernador en toda la tierra de Egipto.
Dios quiere prepararnos para el tiempo de grandeza.
2.- Daniel y su proceso (tiempo) de grandeza – su vida de convicción y disciplina
Este hombre llevo a cabo una profunda disciplina en el Señor de búsqueda diaria.
Es admirable como en los momentos más duros de nuestra vida es necesaria la disciplina espiritual para soportar grandes pruebas.
Daniel desde su vida de juventud busca disciplinarse asimismo no dándole rienda suelta a sus apetitos carnales de placeres y gustos.
Daniel 1:8
Daniel estaba decidido a no contaminarse con la comida y el vino del rey. Así que le pidió permiso a Aspenaz para evitar esos alimentos y permanecer sin mancha.
Además siempre se mantuvo constante en su devoción al Señor pasara lo que pasara.
Daniel 6:10
Daniel, sabiendo que el rey había firmado esa ley, de inmediato se fue a su casa y abrió las ventanas del segundo piso que daban hacia Jerusalén, y se arrodilló para orar y dar gracias a Dios, tal como siempre lo hacía tres veces al día.
Recordemos como Dios utilizo a este hombre en dos grandes imperios: el babilonio y medo-persa. Esto no fue más que por su vida disciplinada entregada al Señor desde temprano.
Revelo los grandes sueños de Nabucodonosor dándole la preeminencia en este Reino, se mantuvo por su disciplina en las cosas de Dios una vida recta y honrada que lo calificaba como un hombre de confiar pero además poseía lo que muchas querían, discernimiento de cosas.
Así que podemos decir que Daniel, se mantuvo en la cima de estos reino por su autodisciplina.
La otra parte de este hombre es su convicción. Esto vino agregado por su disciplina, aprendió a confiar y creer que el Dios a quien aprendio a servir le libraría de cualquier peligro.
Esto se nota en el capitulo 6, donde es lanzando al foso de los leones y nada le sucede, en cambio a los acusadores, los leones no les permitieron ni siquiera tocar el suelo cuando eran devorados.
Convicción en Dios es necesaria para saber que estando en la cima muchas querrán vernos caer.
3.- David y su proceso (tiempo) de grandeza – su vida de perspectiva y propósito
David también es uno de los personajes bíblicos que desde su juventud buscaba al Señor.
Recordemos su lucha contra Goliat, la biblia habla de que era un niño prácticamente. Su ungimiento por el profeta Samuel lo hace ver como tal también.
La trama para su grandeza se centra en los dos episodios cuando su Rey ya desechado, Saúl; comenzó a perseguirle por un sentir de saber que David era el nuevo Rey designado directamente por el Señor.
Hay mucho que decir sobre esto pero lo que me gustaría enfocar, es que en la cueva de En-gadi y el desierto de Zif, Dios le muestra a David su propósito y le cambia inmediatamente su perspectiva de como alcanzar el trono.
Veamos:
1 Samuel 24:2-12
Y tomando Saúl tres mil hombres escogidos de todo Israel, fue en busca de David y de sus hombres, por las cumbres de los peñascos de las cabras monteses.
Y cuando llegó a un redil de ovejas en el camino, donde había una cueva, entró Saúl en ella para cubrir sus pies; y David y sus hombres estaban sentados en los rincones de la cueva.
Entonces los hombres de David le dijeron: He aquí el día de que te dijo Jehová: He aquí que entrego a tu enemigo en tu mano, y harás con él como te pareciere. Y se levantó David, y calladamente cortó la orilla del manto de Saúl.
Después de esto se turbó el corazón de David, porque había cortado la orilla del manto de Saúl.
Y dijo a sus hombres: Jehová me guarde de hacer tal cosa contra mi señor, el ungido de Jehová, que yo extienda mi mano contra él; porque es el ungido de Jehová.
Así reprimió David a sus hombres con palabras, y no les permitió que se levantasen contra Saúl. Y Saúl, saliendo de la cueva, siguió su camino.
También David se levantó después, y saliendo de la cueva dio voces detrás de Saúl, diciendo: !Mi señor el rey! Y cuando Saúl miró hacia atrás, David inclinó su rostro a tierra, e hizo reverencia.
Y dijo David a Saúl: ¿Por qué oyes las palabras de los que dicen: Mira que David procura tu mal?
He aquí han visto hoy tus ojos cómo Jehová te ha puesto hoy en mis manos en la cueva; y me dijeron que te matase, pero te perdoné, porque dije: No extenderé mi mano contra mi señor, porque es el ungido de Jehová.
Y mira, padre mío, mira la orilla de tu manto en mi mano; porque yo corté la orilla de tu manto, y no te maté. Conoce, pues, y ve que no hay mal ni traición en mi mano, ni he pecado contra ti; sin embargo, tú andas a caza de mi vida para quitármela.
Juzgue Jehová entre tú y yo, y véngueme de ti Jehová; pero mi mano no será contra ti.
En este pasaje se nota como David recibió en su corazón una advertencia de Dios. Aun cuando las circunstancias y las cosas aparentemente se aprestaban para que El reclamase con derecho el trono, comprendió que el Señor en su tiempo se lo daría si era paciente y confiaba en El.
Por esa razón quito de si mismo el pensamiento que otros querían que tuvieses, cambio su perspectiva de manera personal por lo que hizo en esa cueva.
De nuevo al tener otra oportunidad, más bien como si Dios lo probara o el diablo lo quisiera tentar, vuelve a repetirse por segunda vez la circunstancia que le podría dar su reino.
En esta ocasión en el desierto de Zif.
1 Samuel 26:6-11
Entonces David dijo a Ahimelec heteo y a Abisai hijo de Sarvia, hermano de Joab: ¿Quién descenderá conmigo a Saúl en el campamento? Y dijo Abisai: Yo descenderé contigo.
David, pues, y Abisai fueron de noche al ejército; y he aquí que Saúl estaba tendido durmiendo en el campamento, y su lanza clavada en tierra a su cabecera; y Abner y el ejército estaban tendidos alrededor de él.
Entonces dijo Abisai a David: Hoy ha entregado Dios a tu enemigo en tu mano; ahora, pues, déjame que le hiera con la lanza, y lo enclavaré en la tierra de un golpe, y no le daré segundo golpe.
Y David respondió a Abisai: No le mates; porque ¿quién extenderá su mano contra el ungido de Jehová, y será inocente?
Dijo además David: Vive Jehová, que si Jehová no lo hiriere, o su día llegue para que muera, o descendiendo en batalla perezca, guárdeme Jehová de extender mi mano contra el ungido de Jehová. Pero toma ahora la lanza que está a su cabecera, y la vasija de agua, y vámonos.
Aprendió David su propósito para llegar al trono, estar en la cima requería de alguien que fuera obediente a Dios en primer lugar y que dejara todo en sus manos.
2 Samuel 5:4-5
Era David de treinta años cuando comenzó a reinar, y reinó cuarenta años.
En Hebrón reinó sobre Judá siete años y seis meses, y en Jerusalén reinó treinta y tres años sobre todo Israel y Judá.
Aquí esta la recompensa del que espera a que el Señor lo lleve a la cima.
CONCLUSION
Estos tres hombres desde muy temprano en su vida aprendieron a servir a Dios, lo cual indica que puede verse involucrado el crecimiento interior en lo esencial, lo espiritual.
Estar en la cima, como estos hombres lo lograron, fue un proceso como hemos dicho de tiempo. Tiempo que llevo momentos buenos y malos pero que por parte de estos hombres entendieron algo en ellos.
Es necesario el carácter, el propósito, la perspectiva y la disciplina para estar en la cima y mantenerse por la gracia de Dios en ella.
No es malo estar en la cima, lo malo seria alcanzar la cima no importándonos nada, hacer daño a los demás, o rebajarnos como personas, llegando a vendernos.
Dios ha dicho que estaríamos en la cima pero dejemos que El nos lleve hasta allá en su proceso.