Dando a Dios nuestras Primicias

09.01.2017 11:24

Por: Pastor Carlos Orellana

 

 

TEXTO BASE:

Éxodo 22:29

No demorarás la primicia de tu cosecha ni de tu lagar. Me darás el primogénito de tus hijos.

 

Éxodo 23:19

Las primicias de los primeros frutos de tu tierra traerás a la casa de Jehová tu Dios. No guisarás el cabrito en la leche de su madre.

 

INTRODUCCION

Darle a Dios pareciera que es fácil pero en realidad debe ser dado con buena obediencia pues el Señor no acepta cualquier ofrenda solo porque se la den.

 

El es el dueño del oro y la plata y como se ha dicho El no tiene necesidad que le demos pero también denota en nosotros el interés por darle a El de lo que El mismo nos ha dado en nuestro corazón agradecido.

 

De esta manera es que tenemos que venir con un corazón agradecido y alegre a darle a Dios. La intención debe ser de agradarle con lo que le estamos ofreciendo esperando que lo reciba y nos de su aprobación.

 

Dios también no dejara de bendecirnos por esta actitud de darle y acordarnos de hacerlo.

 

DEFINIENDO LAS PALABRAS CLAVES

Primicia

Fruto primero que da algo.

"el maíz brota frondoso y sus granos tiernos son la primicia de la cosecha"

 

H7225 - reshít

Primero, en lugar, tiempo, orden o rango (especialmente primicias) principio.

 

¿QUE SON LAS PRIMICIAS?

1.- Son nuestros primeros frutos de nuestras cosechas y rebaños entregados al Señor

Cada vez que se cosechaba o se tenía una nueva cría en los rebaños, se debía de apartar para el Señor de eso una parte voluntariamente. Esta consistía en lo que el corazón agradecido dictara. Y luego paso a ser de manera obligada en la Ley, Dios el Señor lo exigía.

 

Estos primeros frutos o primogénitos de rebaños debían llenar ciertas características, dentro de ellas estaban la calidad. No se podía llevar a Dios algo que no estuviera en buen estado para iniciar.

 

Números 18:29

De todos vuestros dones ofreceréis toda ofrenda a Jehová; de todo lo mejor de ellos ofreceréis la porción que ha de ser consagrada.

 

Deuteronomio 15:21

Y si hubiere en él defecto, si fuere ciego, o cojo, o hubiere en él cualquier falta, no lo sacrificarás a Jehová tú Dios.

 

Y también era entregado de una manera establecida en el Templo del Señor.

 

Deuteronomio 12:4-7

No haréis así a Jehová vuestro Dios, sino que el lugar que Jehová vuestro Dios escogiere de entre todas vuestras tribus, para poner allí su nombre para su habitación, ése buscaréis, y allá iréis.

Y allí llevaréis vuestros holocaustos, vuestros sacrificios, vuestros diezmos, y la ofrenda elevada de vuestras manos, vuestros votos, vuestras ofrendas voluntarias, y las primicias de vuestras vacas y de vuestras ovejas; y comeréis allí delante de Jehová vuestro Dios, y os alegraréis, vosotros y vuestras familias, en toda obra de vuestras manos en la cual Jehová tu Dios te hubiere bendecido.

 

Deuteronomio 14:23 

Y comerás delante de Jehová tu Dios en el lugar que él escogiere para poner allí su nombre, el diezmo de tu grano, de tu vino y de tu aceite, y las primicias de tus manadas y de tus ganados, para que aprendas a temer a Jehová tú Dios todos los días.

 

Ahora nuestras primicias no son legumbres o ganado pues todos trabajamos y se nos da el pago de nuestro esfuerzo en dinero obviamente. De esto debemos dar a Dios de manera voluntaria una parte, recordándonos de sus mandamientos.

 

Además podemos ofrecer en primicias nuestro tiempo, al darle lo primero del día a El en adoración y búsqueda en oración.

 

2.- Son nuestras oportunidades para expresarle al Señor nuestro cuidado por agradarle.

Al darle al Señor nuestras primicias estamos recordándole que El es primero siempre para nosotros en nuestros pensamientos y que lo que queremos es agradarle en todo con nuestras acciones.

 

Las primicias recuerdan que el Señor es quien debe recibir lo primero de nuestras manos, esto es bueno y agradarle ante sus ojos. Nuestro Dios es glorificado con este tipo de acción y hacen que su bendición venga sobre nosotros por tener este sumo cuidado hacia El.

 

Proverbios 3:9-10

Honra a Jehová con tus bienes, Y con las primicias de todos tus frutos; Y serán llenos tus graneros con abundancia, Y tus lagares rebosarán de mosto.

Es una promesa del Señor bendecirnos al darle de lo primero a El.

 

El caso de Caín y Abel – referentes a las primicias

Veamos algunas diferencias bien marcadas

 

Caín	Abel
El Primer hijo de Adán y Eva	El Segundo hijo de Adán y Eva
Era labrador	Era Pastor
El primer homicida	El primer mártir por agradar a Dios
No fue de lo primero que le trajo a Dios	Fue de lo primero que le trajo a Dios
No especifica si era lo mejor	De lo mas gordo

 

 

 

 

 

 

 

 

Estas diferencias nos arrojan luz muy importante:

1.- Caín como el primer hijo era el consagrado a Dios pero la Biblia narra el hecho contrario en su disposición de ser de Dios.

 

1 Juan 3:12

No como Caín, que era del maligno y mató a su hermano. ¿Y por qué causa le mató? Porque sus obras eran malas, y las de su hermano justas.

 

Esta expresión “era del maligno” designa la intención en su corazón de hacer las obras que hace el enemigo de matar, robar y destruir. Y fue precisamente eso lo que le hizo a su hermano de sangre, Abel.

 

2.- Aunque su oficio era de labrador de la tierra no le quitaba ningún merito para ofrecerle al Señor lo mejor de la tierra, es decir que estaba en igual posición que Abel para darle una ofrenda de primicia de calidad a Dios también.

 

Hebreos 11:4 

Por la fe Abel ofreció a Dios más excelente sacrificio que Caín, por lo cual alcanzó testimonio de que era justo, dando Dios testimonio de sus ofrendas; y muerto, aún habla por ella.

 

La expresión “mas excelente sacrificio” nos corrobora su grado de ofrenda al Señor.

 

3.- Nuestras aptitudes marcan la diferencia para el Señor. El sabe con que intenciones venimos a ofrecerle, si con un corazón agradecido o lo hacemos por obligación.

 

Además estas aptitudes harán que Dios hable por nosotros.

 

Hebreos 11:4 

Por la fe Abel ofreció a Dios más excelente sacrificio que Caín, por lo cual alcanzó testimonio de que era justo, dando Dios testimonio de sus ofrendas; y muerto, aún habla por ella.

 

4.- Caín no le dio al Señor de lo primero de sus frutos por lo que en realidad no estaba para agradarle era mas como un deber el darle al Señor, esto marco enormemente la diferencia con Abel que si dio de lo primero.

 

Volvemos al punto dos que hablamos arriba. Agradamos al Señor cuando siempre lo ponemos a El en primer lugar y le damos también de lo primero que tenemos en nuestras manos.

 

No digamos que después le vamos a dar a Dios algo de lo que nos sobre de nuestras cuentas porque primero hay que pagar deudas y atender las obligaciones, esto hará que el Señor no vea con agrado nuestras ofrendas.

 

Génesis 4:3-4

Y aconteció andando el tiempo, que Caín trajo del fruto de la tierra una ofrenda a Jehová.

Y Abel trajo también de los primogénitos de sus ovejas, de lo más gordo de ellas. Y miró Jehová con agrado a Abel y a su ofrenda;

 

5.- La calidad de la primicia era alta en la de Abel “de lo mas gordo” mientras que Caín no se hace alusión alguna a esta.

 

Tal vez podemos suponer que eran frutas o legumbres pasadas de tiempo y hasta en estado de descomposición como para exagerar un poco.

 

Pero lo real es que a Dios no le gusto y eso dice mucho.

 

Génesis 4:3-5

Y aconteció andando el tiempo, que Caín trajo del fruto de la tierra una ofrenda a Jehová.

Y Abel trajo también de los primogénitos de sus ovejas, de lo más gordo de ellas. Y miró Jehová con agrado a Abel y a su ofrenda; pero no miró con agrado a Caín y a la ofrenda suya. Y se ensañó Caín en gran manera, y decayó su semblante.

 

Esto nos debe recordar lo que Dios pide, que sea algo sumamente bueno para El.

 

UNA AMONESTACION DEL SEÑOR

Malaquías 1:6-9, 13-14

El hijo honra al padre, y el siervo a su señor. Si, pues, soy yo padre, ¿dónde está mi honra? y si soy señor, ¿dónde está mi temor? dice Jehová de los ejércitos a vosotros, oh sacerdotes, que menospreciáis mi nombre. Y decís: ¿En qué hemos menospreciado tu nombre?

En que ofrecéis sobre mi altar pan inmundo. Y dijisteis: ¿En qué te hemos deshonrado? En que pensáis que la mesa de Jehová es despreciable.

Y cuando ofrecéis el animal ciego para el sacrificio, ¿no es malo? Asimismo cuando ofrecéis el cojo o el enfermo, ¿no es malo? Preséntalo, pues, a tu príncipe; ¿acaso se agradará de ti, o le serás acepto? dice Jehová de los ejércitos.

Ahora, pues, orad por el favor de Dios, para que tenga piedad de nosotros. Pero ¿cómo podéis agradarle, si hacéis estas cosas? dice Jehová de los ejércitos.

 

Habéis además dicho: ¡Oh, qué fastidio es esto! y me despreciáis, dice Jehová de los ejércitos; y trajisteis lo hurtado, o cojo, o enfermo, y presentasteis ofrenda. ¿Aceptaré yo eso de vuestra mano? dice Jehová.

Maldito el que engaña, el que teniendo machos en su rebaño, promete, y sacrifica a Jehová lo dañado. Porque yo soy Gran Rey, dice Jehová de los ejércitos, y mi nombre es temible entre las naciones. 

 

CONCLUSION

Démosle a Dios siempre nuestras primicias que pueden ser a principio de año y luego a principio de cada mes de ese mismo año o como queramos que puede ser al principio también de cada semana o de cada día inclusive.

 

Si le vamos a dar a Dios recordemos darle siempre lo mejor.

 

Nuestras primicias darán también la bendición del Señor, esa es su promesa.